lunes, 9 de noviembre de 2009


Pasaron tres días hasta que llegamos a un pequeño pueblo cercano a un caudaloso río. Tardamos mucho ya que Ángelo no podía transportarnos a todos juntos con su súper velocidad. En esos días pude conocer más profundamente a Oneiros y Rena. Lo que más me llamó la atención era lo diferente que era el trato con Oneiros una vez que dejamos el templo, era otra persona, ya no mostraba seriedad e indiferencia frente a los demás, era más bien cálido, muy tratable y con mucha alegría, como si ser oráculo se le hubiese impuesto por obligación, que al final así era. Otro caso era Rena, ella se comportaba tal cual la había conocido días atrás, simpática, tranquila y muy decidida sobre todo con lo que se relaciona a su señor Oneiros al que protege a toda costa a pesar de ser una simple arpista.
Comimos en un modesto puesto ubicado frente a una inmensa fuente decorada con peces dorados y plateados y en el centro de la misma un hombre musculoso de barba con el torso desnudo sobre un carruaje muy llamativo, en su mano izquierda poseía un manojo de algas mientras que en la otra un imponente tridente de plata direccionado hacia el este.
Al principio me quedé impresionada al pensar la cantidad de personas que darían lo que sea incluso hasta lo que no tiene por estar en mi lugar observando estas maravillas impensadas en el siglo XI.
-Hey! te sucede algo?- dijo Rena mientras se ubicaba a mi derecha.
- No, es sólo que me intriga hacia dónde apunta esta figura de Poseidón- dije señalando la dirección indicada por el dios.
- Jaja, tendrás que aprender mucho de nosotros si quieres pasar inadvertida en esta época- reía calladamente.
Oneiros ya sabía lo que me había sucedido ya que tuvo un sueño donde me veía junto a Ángelo explicándole lo que me había sucedido. Además nunca dudó de la credibilidad de mi historia ya que él tampoco era muy normal que digamos y lo mismo con Rena, a la que había puesto al día.
-En aquella dirección se encuentra el principal puerto de Grecia, la ciudad costera de Cabos Sounion, donde se dice que Poseidón vigila todos los días por el bien de sus fieles- comentaba mientras miraba fijamente el rostro del señor de los mares.
- Pero si su templo está en otro lugar, porque hay una estatua tan imponente ubicada aquí?- pregunté.
-Es porque en los pueblos cercanos, hay estatuas similares para guiar a los fieles hasta el recinto principal del grandioso Poseidón.
- Ya veo- dije mientras me volvía a reunir con el resto del grupo que estaba discutiendo sobre nuestro próximo destino.
Nos aprovisionamos de alimentos para continuar el viaje utilizando únicamente una de las tantas monedas que Oneiros sacó de su templo hace días atrás. Luego fuimos a recorrer el lugar y a su vez poder contemplar la arquitectura tan detallista que había en los templos de la zona. Lentamente, la noche avanzaba hasta que el sueño se hizo dueño de nosotros.
Al otro día el cielo se presentó nublado y el sol apenas podía asomarse por los recovecos que las nubes dejaban y por si fuera poco, el frío era más intenso. Ya preparados para seguir nuestro viaje, vimos cómo un grupo de unos 7 sujetos portando arcos, flechas y lanzas estaban alistándose para adentrarse en el bosque a unos escasos doscientos metros de la salida del pueblo. Mientras pasábamos vimos como lentamente se adentraban en el bosque con cautela hasta que el más rezagado también se perdió de vista.
Continuamos el recorrido cuando 10 minutos después encontramos a un pequeño niño llorando y a su madre tratando de consolarlo a un lado del camino.
-Que sucede pequeño por qué estás llorando? – dijo Ángelo inclinándose frente suyo.
- E… es …. Q…. que licos se me escapó- lloraba mientras trataba de explicarse.
- Lo que sucede es que todos los días su mi hijo lo saca a pasear por el bosque porque el resto del día queda dentro de la casa para que no se escapé- señaló la madre.
-Y ya se ha escapado en otra ocasión- dije mientras me concentraba en tranquilizar al pequeño con mi poder recientemente descubierto.
Negando con la cabeza- no, esta es la primera vez que se escapa- dijo mientras veía como el niño se tranquilizaba lentamente.
-Es que se asustó porque se escuchó un ruido muy fuerte como si fuera un trueno- agregó el niño ya mucho mejor de ánimos.
-Ya veo- Rena se reincorporaba-. Al parecer es muy importante para el pequeñin.
-Sí, lo que sucede es que su padre murió hace un año cuando estaba cazando cuando calló de una zona elevada y se golpeó la cabeza fuertemente- agregó mientras sus ojos se llenabas de lágrimas-. Luego al ver que no llegaba fuimos a buscarlo y luego de mucho tiempo lo encontramos ya muerto con un pequeño ciervo acurrucado junto a su cuerpo. Al verlo, éste no huyó sino que se levantó y lentamente se acercó a mi hijo al que acarició con su rostro calmándole el llanto. Por eso es tan importante ya que creemos que parte de mi marido vive junto a nosotros a través de Licos.
- Licos es un Ciervo?- dije alarmada mientras me volteaba bruscamente hacia Oneiros.
Luego de un segundo de pausa, Oneiros entendió- Los cazadores!.
-Los cuatro nos levantamos y decidimos intentar encontrarlo para rescatarlo del grupo de caza que se había adentrado al bosque hace unos veinte minutos antes.
-No te preocupes jovencito, vamos a buscarlo nosotros, ustedes quédense en su casa, no vaya a ser que regrese y no los vea- dijo Oneiros.
-Muchas gracias- coincidieron ambos.

Luego de estar diez minutos dentro del bosque, decidimos dividirnos en dos grupos. Yo decidí acompañar a Ángelo y Rena y Oneiros se dirigieron en sentido opuesto.
Buscamos por todos lados, incluso dentro de cada hueco de los árboles donde sospechábamos que podía caber un pequeño ciervo. No pasó mucho tiempo cuando nos encontramos a uno de los cazadores que estaba tirado en el suelo a la espera de alguna presa que se cruzase por ahí, pero sólo logramos impacientarlo y recibir uno que otro insulto que no llegué a comprender.
De vez en cuando, nos separábamos para buscar más rápido, por un lado, Ángelo utilizaba su poder para surcar rápidamente el bosque mientras yo cerraba los ojos para poder sentir las emociones de la atmósfera en busca de alguna que denote expectativa o ansiedad de algún cazador, pero no conseguí captar nada, tal vez no pueda utilizarlo a grandes distancias.
Luego de hacerlo unas 7 veces en distintos lugares, Ángelo apareció como un rayo frente mío para comunicarme que lo había encontrado, pero que no quería acercarse a él ya que le tenía miedo.
-Le tienes miedo a un inofensivo Ciervo bebé- dije de manera burlona.
-Algún problema con eso- se volteó ofendido.
-No, es que como trabajas en el campo y al suponer que tenías animales, me parece extraño que le temas a ese animalito- me justifiqué.
-Es salvaje y no es lo mismo, fin de la discusión- dijo-. Vamos a buscarlo-. Mientras se agachaba para dejarme subir a su espalda.
Nuevamente esa sensación tan extraña de estar atravesando una galería de cuadros con vivos colores a toda velocidad, hasta que se detuvo en seco en un pequeño claro.
-Dónde está?- pregunté.
-Allí- señaló
El ciervito estaba acurrucado debajo de unas raíces para evitar que alguien lo alcance. Lentamente me acerqué, pero él se mostraba amenazante, lo que causó que retrocediera unos pasos hacia mi compañero. Entonces miré a Ángelo que estaba más tenso y rígido que un árbol y tomé la decisión de probar mi habilidad. Cerré los ojos y me concentré en buscar algún sentimiento de temor proveniente del animal. El tiempo pasaba lentamente y no lograba nada hasta que noté algo, no era temor, era algo diferente, sentía una gran excitación y expectativa. Luego de interpretarlo por un minuto aproximadamente me di cuenta que era ni más ni menos que Ansiedad.
Cuando decidí abrir los ojos, un leve sonido proveniente de nuestras espaldas similar al movimiento de un arbusto cuando….
-CUIDADO EVA! – Gritó Ángelo.
Un golpe seco me tiró al suelo con una velocidad increíble mientras escuchaba un grito de dolor tan espeluznante que me heló la sangre.
Al voltearme para ver qué había sucedido, Ángelo estaba atrás mío en la tierra agarrándose la parte posterior de su pierna. Levanté la vista y vi como uno de los cazadores que estaba oculto entre los arbustos salía huyendo en dirección al pueblo.
Me acerqué a mi compañero y me fijé porqué se tocaba con tanto dolor la pierna. Y era lo que me temía, una flecha estaba incrustada en la parte trasera de su pierna y desde cuya herida brotaba sangre – Dios mío Ángelo, que sucedió?- grité espantada.
-La flecha iba dirigida al ciervo y tu estabas acercándote a él , por lo tanto te había puesto en el trayecto del proyectil, por lo que te empujé para evitar que te dañasen- dijo con dolor.
-Y te hirieron por mi culpa, que puedo hacer para ayudarte?- pregunté.
-Busca a Licos para ir en busca de un Sanador- dolorido se dirigió a mí.
Levanté la mirada en busca del cachorrito, pero no había nada.
-Se escapó- dije derrotada.
-No lo puedo creer- golpeó la tierra.
No sabíamos qué hacer, solos en el claro, en el centro de un bosque, sin saber cómo movilizarnos ya que no podía cargar con su peso hasta el pueblo.

-Por los dioses Eva, dónde estaban?- se dirigió agitada Rena desde los arbustos más cercanos.
-Rena que suerte que viniste, Ángelo resultó herido por una flecha al tratar de protegerme cuando intentábamos atrapar al Licos, pero escapó- bajé la mirada hacia la cara de mi amigo tirado boca abajo en la tierra.
- Por dios! Como es posible? Acaso fue un cazador?- preguntó.
Asentimos al mismo tiempo.
-Sí, pero no te preocupes, no es tan grave como parece. Lo malo es que perdimos al ciervo.
-Eso crees- dijo una voz familiar.
De repente apareció Oneiros con un bulto marrón entre sus brazos. No era ni más ni menos que Licos.
-Oímos un grito y salimos corriendo para esta dirección cuando nos cruzamos con Licos y lo capturé.
-Que alivio, no fue en vano después de todo- Ángelo se dirigió al resto mientras trataba de levantarse.
-Eva, sostén a Licos que ayudaré a Ángelo a salir del bosque.
-Muy bien- tomé al ciervo mientras Rena y Oneiros ayudaban a nuestro lesionado amigo a levantarse y ubicarse a un lado de nuestro joven oráculo mientras apoyaba su peso sobre su hombro.
- Estás bien?- preguntó a Ángelo.
- Si bastante cómodo- contestó.
-Bien, en marcha amigos- comenzó a avanzar.
Salimos del bosque cuando ya estaba Anocheciendo. Nos dirigimos hacia la pequeña cabaña que se encontraba no muy lejos de donde nos encontramos con los dueños de Licos. Ambos esperaban en la entrada de la misma mirando en otra dirección cuando el niño volteó:
-Licos! Lo encontraron!- dijo mientras corría en nuestra dirección.
El ciervo se sacudió y se libró de mis brazos para caer y correr hacia su dueño, para logara un encuentro emotivo.
-Por el dios Zeus, que le ha pasado Joven?- dijo la madre.
-Lo hirieron al tratar de protegerme de unos cazadores que intentaban cazar a Licos.
El niño abrazó con fuerza a su animal.
-Por favor entren a la casa que intentaré ayudarte con esa herida- señaló la madre mientras abría la puerta.
La madre delicadamente retiró la flecha de la pierna de Ángelo provocándole un poco de dolor. Luego sacó una especie de líquido pastoso color verde que se lo colocó sobre la herida. Al principio no sabía que haría pero al ver la cara de alivio de mi compañero deduje que era para calmar el dolor. Luego fue vendado.
-Con esto por lo menos podrás aguantar hasta llegar a la gran ciudad cercana- dijo la mujer mientras guardaba sus herramientas en una especie de botiquín antiguo.
- Aquí no hay ningún sanador?- preguntó Rena.
La madre negó con la cabeza.
-No, tienen que salir mañana a primera hora hacia la próxima ciudad., allí hay un grupo de sanadores muy buenos. Nosotros cuando alguien enferma en el pueblo vamos para allí- comentó la mujer-. Pueden quedarse esta noche aquí si desean.
-Muchas gracias- respondimos los cuatro al unísono.

Esa misma noche no podía pegar un ojo y me puse a mirar mi bolso en el que llevaba algunos objetos de mi época. Allí había varias hojas y lapiceras, mi celular apagado, mi cámara de fotos, mi grabadora, mi monedero y documentos. Los empecé a mirar uno a uno mientras recordaba cómo era mi vida antes de la tragedia del Mc donalds.
El silencio de la casa era total, no había rastros de movimiento en ningún lado, incluso podía escuchar mi respiración hasta que…
-NOOOOOOOO!!!!!


-------------------------------------------------------------------------------------------------

Bueno, antes que nada, volví luego de mucho tiempo.

La verdad que ultimamente estoy muy ocupado con al facultad y ahora con un poco mas de tiempo me dispuse a actualizar el blog.

Espero poder actualizarlo semanalmente...


un abrazo